La señal de streaming Olga generó indignación tras emitir un sketch que parodiaba el pesebre viviente, una tradición asociada a la religión católica. La polémica escaló rápidamente en redes sociales, mientras Migue Granados, creador de la plataforma, defendió el contenido afirmando que “cada uno elige qué ver”. Toto Kirzner, quien participó en la interpretación, calificó el material como “simple humor”.
Sin embargo, Esteban Romeo, estudiante de Derecho de la UCA y militante de La Libertad Avanza (LLA), presentó una denuncia judicial contra Olga, acusándola de irrespetar creencias religiosas.
Según Romeo, el sketch “lesiona profundamente los valores de los ciudadanos argentinos” y exigió una disculpa pública en horario central, así como un compromiso explícito de la plataforma para evitar futuras emisiones similares.
La denuncia fue acompañada por una carta documento que fija un plazo de 72 horas hábiles para recibir una respuesta. “No vamos a permitir que quede impune”, declaró Romeo, quien también expresó su descontento a través de la red social X (antes Twitter).
En sus publicaciones, afirmó: “Lo ocurrido en Olga viola la Constitución Nacional, incitando al odio hacia una religión protegida por nuestro sistema jurídico”.
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