Revuelo entre los vecinos del country Altos de la Ribera en Santo Tomé al detectar que una de las personas que vive en el lugar, que según testigos es un acaudalado empresario, ingresaba a otras propiedades a robar. La situación se develó cuando, cansados de que le falten cosas, una familia instaló cámaras de vigilancia en el interior de su casa y lograron identificarlo.
La desaparición de elementos de valor y dinero primero los hizo desconfiar de su padre. “Le dábamos un celular y desaparecía, le dábamos vinos para obsequio y desaparecieron. Y cada vez seguía faltando más plata”.
El hecho quedó al descubierto cuando gracias a las cámaras instaladas se encontraron con la sorpresa de que quien robaba en la casa era un vecino. “Empezó yendo a decir que se le cayó la pelota, se hacía el amigo, pero era mentira, era para ver.
Por los robos estaría detenido un jardinero que habría sido acusado por el propio hombre que luego quedó filmado revisando la casa. “El jardinero decía que era inocente y que había visto a este propietario entrar a la casa de otro vecino amigo. Pero no le creyeron al jardinero y terminó preso“, contó el hijo de las víctimas.
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