La actitud de negación de la población hacia la crisis sanitaria qué vivimos es temeraria y de niveles casi suicidas.
La segunda ola de contagios llegó con más virulencia, ataca a niveles de edad muchos más jóvenes y multiplicó los casos de manera dramática.
Según indicaron desde la gobernación, el retrazo en la salida del video del gobernador al aire se debió a charlas de última hora con presidencia, más allá de esas chralas de última hora habría qué sugerirle al área de comunicación del gobierno provincial qué los retrasos y fallas en la comunicación hacia la sociedad le hacen terriblemente mal a la gestión y la investidura de Perotti.
Por otro lado queda por resolver la falta de conciencia de vastos sectores sociales qué dicen estar hartos de la cuarentena cuando son los mismos qué la propagan y alargan realizando acciones y actividades qué no ayudan en nada.
En la foto de ésta nota se aprecia a hinchas de central detenidos por no respetar las restricciones impuestas lo que muestra el nivel de rechazó y negación a la enfermedad.
Aglomeraciones por festejos deportivos, aglomeraciones en parques y plazas sin ningún criterio sanitario, aglomeraciones en reuniones sociales y familiares, todo eso es un acto de rebelión innecesario a la hora de plantear su postura frente a la infección.
“No es joda lo qué pasa, nadie le da bola a la cuarentena pero después llaman llorando a los sanatorios pidiendo camas u oxigeno, así no hay sistema de salud qué aguante” palabras más palabras menos es lo qué se escucha en todas las áreas publicas o de gobierno de la región.
Ayer el acceso al aeropuerto estaba infestado de jóvenes que no sólo no respetaban los protocolos si no qué actuaban como si no sucediera nada, seguramente muchos de ellos estarán en los próximos días llorando la muerte de algún familiar por covid.
Es hora de despertar del sueño del covid y asumirlo como es y los riesgos qué genera.
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