Tamara tiene un hijo llamado Braian de 8 años, que se rehusaba a realizar sus tareas escolares.
Lo que esta mamá pensó hacer, luego de una larga lucha donde su autoridad parecía no hacer efecto en el niño, era llevarlo con las autoridades superiores, la comisaría del pueblo.
Y así lo hizo.
Estando allí, los uniformados atendieron a Tamara escuchando con atención el pedido de esta madre. “Esta confrontación con las autoridades, al menos podría ocasionar una reacción en el menor y haría caso las próximas veces que la orden sea realizar los trabajos escolares”, pensaba esta madre desesperada para que su hijo estudie.
Sin embargo, en vez de un escarmiento verbal, los agentes policiales optaron por ejecutar otra acción. Una grata sorpresa se llevó esta madre al ver como con tanta paciencia y amabilidad los empleados policiales se sentaron junto al nene y lo ayudaron a realizar su tarea. Una vez que Braian terminó sus deberes, los agentes, realizaron una colecta de dinero entre ellos y obsequiaron cosas para Braian y sus hermanos.
Fuente: Diario El Norte
Para más info: www.expofunes.com.ar